Una preocupación conjunta de sensibilización

Cáritas Madrid. 11 de abril de 2019.- Como cada año, para preparar la Festividad de nuestro Patrón, San Isidro Labrador, hemos celebrado las jornadas de sensibilización, promovidas por la Delegación de Enseñanza y la de Infancia y Juventud de la Vicaría VI, con colegios del territorio.

Los días 3 y 4 de Abril, en la Pradera de San Isidro y en las Parroquias de San Miguel Arcángel, San Fulgencio y San Bernardo, y Santa Rosa de Lima, diversas instituciones eclesiales hicieron partícipes a los niños y jóvenes de la realidad social y de la preocupación de la Iglesia por hacer presente el Reino de Dios en medio de la injusticia y el sufrimiento de muchas personas en todo nuestro mundo. Además, hubo espacios de actividades deportivas, en la Pradera, y de oración y celebración del Sacramento del Perdón en las Parroquias. 

Han participado distintos grupos de primaria y secundaria de los Centros concertados y públicos: Escuelas Pías, Francisco Arranz, Gonzalo Fernández de Córdoba, San Bernardo, S. Gabriel, Ciudad de Badajoz, La Salle, S. Juan García y Emilio Castelar. 

Manos Unidas, Itaka, Ayuda a la Iglesia Necesitada, Albergue de San Martín de Porres, Cesal y Cáritas, hemos contribuido a la comunión para la misión, testimoniando el pluriforme rostro de la Iglesia y su común destino a llevar la buena nueva a los pobres. 

Desde Cáritas Madrid hemos anunciado el cuidado de la Creación como deseo de Dios, que nos la ha dejado como prenda de la eternidad, en la cual se manifiesta su Amor incondicional y se vislumbra el gozo de la realidad futura, en la que "ya no habrá llanto, ni luto, ni dolor", y veremos "unos cielos nuevos y una tierra nueva" en que habitará la justicia. Este ha sido el sueño de los Santos, como San Isidro, que nos precedieron y dejaron memoria del amor de Dios manifestado en sus criaturas, y cómo al disfrutar de la naturaleza y cuidarla, estamos realizando la voluntad misma del Creador, y contribuyendo a la caridad fraterna, ya que nuestros prójimos están en todo el mundo, por muy lejos que se encuentren de nosotros, y su medio ambiente es el nuestro, pues estamos llamados a cuidar de nuestro hermano, de quien somos guardianes.